jueves, 25 de octubre de 2012

A ver que tenemos por ahí: "Resistencia", "Men in Black 3" y el final de la temporada de "American Horror Story".

Resistencia

Es una de esas películas que he mantenido en el fondo del DVB durante meses por razones evidentes: su director, Edward Zwick, es un mediocre con (mucha) suerte; el tema de los judíos en la 2ªGM está más trillado que los gags de "Aída"; lo poco que visioné tenía una estética de telefilme que tiraba pa'trás (es decir, que por el cast parece una superproducción y se gastaron lo mínimo). Y la mantuve grabada sólo por sus dos actores principales: Liv Schreiber y Daniel Craig. No puedo ocultar que cuando tienes razón sientes cierto orgullo gilipollas: en este caso, acerté. La película es muy muy discreta, aburrida, pesada, larga, el argumento no va a ningún lado, los personajes están deslavazados, un desastre, vamos. Pero esos dos brillan cuando están en escena. El Craig es muy conocido pero Liv Schreiber no sólo es un actor roba-escenas (la saga Scream, Lobezno, El mensajero del miedo,...) sino también un talentoso director primerizo y pareja de Naomi Watts. Actores de carácter e intensos, que se creen lo que hacen sin aspavientos. Supongo que les habría hecho falta un director con un par, que superara esa deficiencia visual y esa narrativa pedestre que se gasta el buen amigo Zwick. Porque éste, para no parar de trabajar y con actores importantes, o es amiguete o hace otras cosas, a saber: "Días de gloria", "Estado de sitio", "El último samurai". Películas con potencial que luego no pasaban de decentitas para ver en la sobremesa con tu madre. Cierto, la vi durante la sobremesa.
Nota: hay una escena que sí me conmovió de verdad: cuando atrapan un correo nazi y se dedican a apalearlo en el campamento mientras gritan los nombres de sus parientes muertos. El hecho de que todo esté basado en una historia real lo hace más escalofriante, y humano.

-¿Lo matamos y llamamos a Spielberg?
-Mmmmm...


Men in Black 3

¡Vaya sorpresa! Las sagas son necesarias pero sólo si eres fan esperas lo mejor. Me gustan las dos primeras de los hombres de negro sin ser especialmente adicto, pero ésta es mi favorita desde ya a la espera de revisionar las anteriores (uno de los efectos que provocan las sagas).
Primero, el malo da grima de verdad: ese Boris, el Animal lo tiene todo para dar yuyu, es el más cercano al espíritu cómic de la saga (basada en un cómic que desconozco) y suelta frases memorables. Imponente físicamente, parece una amenaza real. Es complicado crear una tensión verdadera en una película que sabes que va a acabar bien, pero lo consiguen. Y la primera escena es magistral.
Luego, tienes a dos agentes K estupendos. Y esto surge de una necesidad: Tommy Lee Jones no quería trabajar en esta tercera parte así que lo convencieron con esta historia en la que apenas aparece, sustituido por su yo del pasado (un perfecto Josh Brolin). De la adversidad brotan las mejores ideas (si no preguntádselo a Bardem, Berlanga, el cine argentino o a los Guns'n'Roses).
El oráculo de Griffin, la nueva jefa O (Emma Thompson), los chistes sobre Andy Warhol y la Factoría, el final de lagrimita,... Y luego, elementos que ya estaban ahí: la cañera música de Danny Elfman, las increíbles criaturas de Rick Baker, la imaginativa dirección de Sonnefeld... Chapeau, una de las mejores películas del año y mejor que ninguna pues tiene viaje en el tiempo.

                                 En serio que da mal rollo


Y el final de temporada de "American Horror Story" va a merecer un post sólo de esta genial serie, porque sale Jessica Lange y es mú güena.

jueves, 18 de octubre de 2012

Dos películas estimables: El tirador / Imparable


Shooter (El tirador)

Antoine Fuqua es un director del montón, no ha dirigido ninguna gran película pero sí decentes muestras de cine de acción o policiaco al servicio de algún actor estrella: tenemos a Denzel Washington en "Día de entrenamiento", Richard Gere en "Los amos de Brooklyn" o Chow Yun Fat en "Asesinos de reemplazo". Para mí sigue la estela de otros directores afroamericanos como John Singleton, el reivindicable Mario Van Peebles (quizás alguien recuerde "New Jack City") o el mismo Spike Lee cuando se pone más frivolón (véase "Clockers" o "Plan oculto"). Y si marco lo de afroamericano es porque en cierta manera recuperan un poco el cine blaxploitation más refinado, lo modernizan y le dan empaque digno y comercial. Aunque esta peli va por otros derroteros más descarados.
En fin, al grano: "El tirador" entraría en la categoría Bourne con conspiraciones, falsas identidades y asesinatos políticos. Los productores no fueron tan descarados como para pedirle a Matt Damon que siguiera haciendo lo suyo, vieron "Infiltrados" y dijeron: (SPOILER!) "Pues llamemos al que se carga a Damon!" (SPOILER!). Así que Mark Wahlberg es Bourne, digo, un francotirador superexperto al que abandonan en una misión, se cargan a su mejor amigo, logra salir no se sabe cómo del desierto, abandona la "halsión", pero le tocan lo que más le conmueve (LA PATRIA), vuelve a la "halsión", matan a su perro, lo persiguen, casi que lo matan pero no y así hasta que gana. Hay un interés amoroso (no consumado, mejor), poderosas escenas de persecución, una trama inverosímil (EXCURSUS: hace poco vi una película de los 70, "El último testigo" con Warren Beatty, de temática conspiratoria muy parecida pero tratamiento diametralmente opuesto: en los 70 se hacía thriller político desencantado - a la "Los tres días del Cóndor"-; ahora se va al grano, los malos son muy malos y el gobierno al final lo arregla, los USA ganan -hay una vergonzante escena al final de la película con el fiscal del estado mayor o así-, el individuo frente al mal prevalece, es decir, una action movie divertida e inofensiva), un ayudante forzoso -torpón pero noblote-... Total, un pasarratos estupendo que te convence las dos hora casi de metraje y se olvida.
Ah, y en su casting figura, aunque desafortunadamente no aparece demasiado, la imponente Rhona Mitra, una fan-favourite, no sólo por su nombre sino porque aparece gozosamente en dos de mis guilty pleasures de la última década: la cínica "Nip/Tuck" y la carpenteriana "Doomsday".

         (Esto es de Doomsday pero da igual, ¡Rhoooooona!)

Imparable

Tristemente ésta es la última película de Tony Scott (el hombre se tiró de un puente el pasado verano), un director que se ha ganado el respeto de todo Cristo por películas como "Amor a quemarropa" o "Marea roja" y que lo mejor que puedo decir de él es que no le conozco mala película. Teniendo en cuenta que ha hecho unas cuantas y que ha vivido bajo la sombra de su hermanísimo Ridley (del que no se puede decir lo mismo), tiene mucho mérito. Cierto es que tampoco puede presumir de obras maestras reconocidas (para mí, "El último Boy Scout" o "Marea Roja" por ejemplo, lo son) pero sí de un estilo propio que fue depurando en los ultimos años con detalles cercanos al realismo sucio de Sam Peckinpah ("Revenge", "Dominó", "El fuego de la venganza",... tienen deudas estilísticas y éticas con "Grupo salvaje" o "Quiero la cabeza de Alfredo García").
El argumento de "Imparable" no llevó a mucha gente al cine: basada en hechos reales (supongo que muy libremente al igual que su imposible retrato biográfico de "Dominó"), es la historia de un tren de mercancías peligrosas que marcha sin rumbo a gran velocidad. Dos conductores de tren (working class heroes que diría aquél) se enfrentarán (casi) en solitario a la bestia que amenaza con estrellarse en su ciudad y dejarla hecha unos zorros. La verdad es que la cosa no parece estupenda, pero en manos de este hombre y con el gran Denzel Washington (habrá quien no le guste, pero lo dudo) es un entretenimiento irresistible. Por no enrollarme más y ponerlo claro, ya sabes que todo va a salir bien pero aún así te emocionas, sufres y empatizas con unos tipos normalitos que son capaces de cosas extraordinarias (casi que parece que suena eso de "we can be heroes, just for one day...").
No es la mejor de las películas de Tony Scott (suele pasar que las últimas obras no son las más representativas) y la cosa funcionó regular en taquilla, pero es honesta, divertida y el puntito sentimental funciona.


                               Tony, You Win, Perfect.


jueves, 11 de octubre de 2012

La Santísima Trinidad del Fin de Semana: Serpientes en el avión / Los mercenarios / Hilo mortal (o Santa Madre porqué me las trago)

Esto de comentar todo (¡TODO!) lo que ves no es tan agradable como podía parecer sobre todo si tienes el gusto perdido hace tiempo. Aunque en realidad lo sufres tú, no lo haces en silencio, sino que lo legas a los demás y los demás lo sufren, pero menos. Si ya empiezas a tener la sensación que no hay nadie, que nadie te escucha, es todavía más lastimoso, pero puede ser también considerado una valentía por tu parte: ¡que no me lean, endiguá!
Bien, todo esto viene por las tres (¡TROIS!) películas que he visto el uikén, tan prescindibles como cualquier anécdota sobre tu boda o tu faxcinante trabajo. La primera:

SERPIENTES EN EL AVIÓN

No sé si recordaréis que ésta fue un pequeño fenómeno porque, mientras la rodaban, pedían a la gente a través de una página web sugerencias sobre qué debía suceder, en votación democrática, y "punchlines" (es decí, frases con gancho que dijera el gran Samuel L. Jackson). Una vez vista lo que demuestra es que la democracia es una puta mierda y la gente, así en general sin marcar, no sabe hacer cine aunque todos ejercemos de sabios consejeros como si así juera (- ¿y cómo estuvo la peli? - Muuuuu güena, sí, señó). De todas maneras, esto es un medianamente divertido despropósito (más o menos igual a caca), que podía haber durado todavía menos porque le sobra la introducción y que es demasiado consciente de su condición así que mucho menos divertido (¡momentos románticos! ¡heroicidades! ¡buenrrollismo!). En serio, al final deberían haberse ido todos a tomar por culo y hubiera tenido cierta gracia. Ah, y la vendieron como que salía Elsa Pataky, pero el que actúa de verdad es el bebé inexpresivo que porta.

                                          Odio los menús de los aviones

LOS MERCENARIOS

Buenas escenas de acción (aunque preferiría que fueran menos adrenalínicas, más old school), un casting (casi) insuperable para los nostálgicos del cine de acción de las últimas décadas (lo que habría sido con un Charles Bronson, Lee Van Cleef, Lee Marvin o Robert Ginty, aggggg...), dura lo justo e incluso tiene un punto crepuscular a lo Grupo Salvaje. Pero... se queda un poquito corta, un poquito. Para mí, lo mejor de la función es ese agrio Dolph Lundgren que lo borda. Entretenida.

 
                                PA-TA-TA-TA-TA-TA....


HILO MORTAL

La trama tiene cierto gancho: unos malos de acento indefinido (es del 92, con la Guerra Fría superada) poseen un explosivo que se ingiere y sabe como el agua Lanjarón. Así, las incautas víctimas ni se lo huelen (si es que el agua es mú mala, hay que beber cerveza que tiene proteínas) y explotan cual sandías con petardos. Pero resulta que la película es algo flojilla y lo que mola es ver a un Pierce Brosnan jovenzuelo que todavía conserva el look ochentero de chaquetas hortera y barba de tres días a lo Sonny Crockett. Está tan pasado de rosca en casi todas las escenas que parece intoxicado por coca en mal estado (¡otra vez los 80's!). Pero no es eso mal pensados, es que la mujer le ha puesto los cuernos con un senador retaco con peinado a lo tazón (¡los 90's! Agh! Si por lo menos tuviera mullet) y eso, amigos, es muy humillante y no se puede permitir. Yo también me pondría hecho una furia todo el rato. Así que se pasa toda la peli viendo explotar personas cual piñatas (muy gore, sí, señor) y rogando amor a su mujer como un desesperado. ¿Patético? Un poquito sí, pero ahí está uno que se la ve enterita.

 
   No sin mi tazón, yuju!

Haruki Murakami, Macho, Macho Man!


No sé si la disfrutarás, stiff, pero es una perfecta síntesis de dos de tus grandes aficiones: el footing y la lectura (si te pone un poco añade lo que quieras)

viernes, 5 de octubre de 2012

Operación Swordfish (o pez espada de menú)

Mi desinterés por esta película era total. Pero yo me trago lo que sea y ésta con un poco más delito: había visto el último tramo de la película hace un tiempo. La cosa no me dejó mucha huella salvo por Halle Berry y un John Travolta excéntrico y amanerado. Así que me la puse a ver en plan integral (como si me sobrara el tiempo) y... en fin. El director, Dominic Sena, es una especie de clon de Michael Bay (¡madre mía!), y así cumplió en esa cosica llamada "60 segundos" (que salía Nicolas Cage y Angelina Jolie!), en donde decían eso de que si te gusta más hacer el amor o los coches: respuesta obvia. Bien, una nadería entretenidilla y ruidosa de argumento absurdo, y es que a mí los coches no me dicen ná. Igual que los ordenadores en ésta, por cierto. Lo que se nota es que el Sena intenta matar a su padre (el Bay) y darle un estilillo propio, algo a lo Tarantino. Pero, ay, aquí se estrella con todo el equipo (¡los coches!) porque la acción descerebrada y los diálogos subnormales funcionan como en la otra, en cambio, la parte seria de autorcillo (la relación paternofilial, los filtros verdecillos, el bien y el mal, el primer diálogo de Travolta sobre la mierda que facturan en Hollywood -¡autocrítica!-) es de huevo frito (expresión acuñada por mi niña para suavizar que es un mojón). Metáfora del descalabro es que una cantidad enorme de coches, the cars again, corren y se despazurran aquí y allá. Y arden y explotan. Me estoy planteando que la obsesión por los coches y estrellarlos como sea le viene del apellido (Sena = Senna?). Y eso que es una película de hackers supermolones, que tienen unos bronceados y unos músculos inadecuados para unas ratillas del ciberespacio. Por otra parte, te ríes a gusto con las explicaciones informáticas y el momento ese que se ponen a teclear como locos para activar no se qué (me apuesto lo que sea que Hugh Jackman tuvo un hacker asesor que le enseñó los tecleados más delirantes meses antes del rodaje... ¡y es que un buen actor tiene que documentarse!). Total, que si no la veis no la oleréis y mejor así. De hecho, la imagen de abajo debería ser el tráiler, sólo la imagen (y los créditos después y cuándo la echan, claro).

PD: Estas crónicas tienen que mejorar pero ya. A ver si comento una de esas del Padrino para ir sobre seguro, vamos. Naaaaa...

                           
   "Pero, ¿!cómo puedes decir que no t'a gustao!?"

jueves, 4 de octubre de 2012

Algunos de los que me conocéis sabéis que llevo un index de las películas que he visto en mi vida. Un innecesario repaso que realizo básicamente por un comentario de Garci en su desafortunadamente desaparecido programa en el que aseguraba que había visto unas 4000 películas (que ya serán unas cuantas más). Así que me planteé cuantas películas había visto en mi vida ya que esa cifra me parecía poca cosa para mí (alarma de soberbia), dado que he tenido épocas de visionar dos y tres películas al día y pagué los estudios de los futuros hijos del propietario de mi videoclub favorito durante mi desperdiciada adolescencia (el mítico Moi's que era tan pequeño que tenía las carátulas de porno en un archivador y la gente le pedía que le sacara las guarrillas, mis peripecias en el videoclub da para una entrada, sí, señor). Ahora llevo anotadas unas 4500 y me doy cuenta de un par de cosas: primero, madre de dios lo que han visto mis ojos; segundo, ¿y esto para qué?; tercero, he pensado seriamente en contar las horas aproximadas que he pasado viéndolas (contando con que algunas las he visto más de una vez y otras entrarían en categorías de "vistas más de 25 veces..." -en serio, es para asustarse, me salen unas cuantas... decenas-); cuarto, me he perdido pero da igual.
Total, que lo que creo que haría que esto mereciera la pena de alguna manera sería colgando en este nuestro blog las críticas de las películas (tranquilos, que no he podido hacer 4500 críticas). Tampoco voy a agobiar a nadie porque NADIE comenta ni lee estas humildes líneas (es triste, pero peor es robar). Así que, voy a seguir el ejemplo de otro de esos blogs que deberías leer antes de morir, el imprescindible Aquí vale todo (pincha para disfrutar), que son unos tipos que película que ven, película que comentan, y les da tiempo a ver unas cuantas (además son unos adictos a las carátulas de VHS, glorioso en serio). Al grano, que película que vea, película que comento (o así, que no tengo tiempo pa' tó). Da igual el género o lo mierdosa que sea, que aquí va a tener un huequecito: yo me pongo contento, la recuerdo porque pongo algún detalle que me llama la atención y pongo una fotaca chula de la portada o algo. Vamos, el colmo de la originalidad (gente, blogs y páginas de crítica de cine hay más que películas de Alfredo Landa). Allá voy...

MÁS FUERTE QUE EL ODIO (el amor, añado yo)

Cuando los distribuidores españoles le dan a la poética de abrocharse la bragueta se les ocurre titular tal que así una pinícula llamada en el original "The Presidio" por insondables razones que se resumen en una: sale Meg Ryan que es actriz romántica, así que parezca un melodrama. El problema es que la trama es más bien de thriller con el toque romántico metido con calzador.

El argumento: el Presidio es una zona de San Francisco acotada para militares donde asesinan a una policía soldado durante un robo en la sala de oficiales. Un avispado y rebelde detective que, ¡oh, sorpresa!, había sido policía militar en Presidio y amigo de la fallecida es encargado del caso junto con un general que, ¡oh, sorpresa!, fue uno de los responsables de su expulsión. Total, que no paran de pelearse porque no se aguantan y, mientras, la investigación no avanza o avanza regular. Resulta que el policía va un día a casa del general y no está, pero sí su hija que está como un queso (si juera gorda y fea, ni la hora). Así que le pide salir de inmediato y de inmediato se enamoran, mientras el poli y el general no paran de pelearse y de obstaculizar su propia investigación (la cosa es así y se repite como el ajo). La relación amorosa va que así, así: una escena bien, otra mal, una bien, otra mal,... Finalmente, gracias a dios, resuelven el caso de manera torticera (que unos tipos que matan y trafican con diamantes sean tan torpes no es normal). Y, por supuesto, la chica, a la que nos han presentado como una buscona, borracha y/o fumadora, se queda con el poli y con el papi. Y es que de repente se quieren un montón. Fin.

Puntos a favor: Sean Connery, desde luego. Las pelis que hizo en los 80 son buenas, regulares y malas, ésta es regulera desde luego, pero tiene el hombre una presencia que se te olvida si la cosa funciona o no.
La policía militar que asesinan es la marine Vasquez de "Aliens, el regreso" (!). Dura un suspiro en pantalla, pero eso es un plus para mí, así que imaginaos mi nivel de exigencia.

Puntos en contra: Mark Harmon (el astronauta de "Luz de luna") siempre me ha caído bien pero aquí no cuela, y, evidentemente, le falta química con otra que pasaba por allí, porque Meg Ryan no es buena actriz, pero se le ha dado bien lo de chica de al lado enamoradiza en algunas comedias románticas no la guarrilla disfuncional que se supone que es en esta película. Y Jack Warden, eterno secundario, está desaprovechado.
El guión se queda a mitad de thriller (la parte más interesante, especialmente la primera escena con el asesinato y la persecución) y a mitad de romance (esto sí que nada de nada).
Luego está la dirección de un tipo como Peter Hyams que ni fu ni fa, un artesano de esos que no se estilan ahora, que siempre cumplen pero depende del productor y el material que le den ("Atmósfera Cero" es un diez; "Sospechoso" es un aprobado; "El fin de los días" es un mojón).

En fin, como la están pasando en plan bucle en el Paramount Channel, si la pilláis en una sobremesa vais a dormir plácidamente (a mí me ha costado verla tres siestas).